Balón gástrico: alternativa no quirúrgica para perder peso

El balón gástrico es una solución médica menos invasiva para la pérdida de peso que ayuda a quienes luchan contra la obesidad a reducir la ingesta calórica y modificar hábitos. Ideal para pacientes con IMC entre 30 y 40 o para quienes deben bajar peso antes de otra cirugía. Con seguimiento profesional, ofrece resultados temporales que pueden impulsar un cambio de estilo de vida sostenible.

Balón gástrico: alternativa no quirúrgica para perder peso

¿Qué es y cómo ayuda el balón gástrico?

El balón gástrico es un dispositivo médico colocado temporalmente en el estómago con el objetivo de disminuir la capacidad gástrica y generar sensación de saciedad más rápida. Al ocupar espacio dentro del estómago, limita la cantidad de alimento consumido por comida y puede retrasar el vaciado gástrico, lo que contribuye a comer con menos frecuencia y reeducar el sentido del tamaño de las porciones.

Mecanismo de acción: más allá del volumen

Su efecto no se reduce únicamente a ocupar sitio. La sensación de plenitud que provoca favorece cambios en la conducta alimentaria y, en combinación con orientación nutricional y actividad física, ayuda a instaurar hábitos más saludables. El balón actúa como una herramienta para iniciar el proceso de pérdida de peso, proporcionando un apoyo físico que facilita el control de la ingesta calórica.

¿Quiénes pueden beneficiarse del balón gástrico?

Los candidatos típicos son adultos con un índice de masa corporal (IMC) entre 30 y 40 que no han conseguido bajar de peso con dieta y ejercicio por sí solos, o personas que prefieren evitar por ahora una cirugía bariátrica. También puede recomendarse en pacientes con IMC mayor que necesitan reducir peso como preparación para otros procedimientos médicos. Es imprescindible una valoración médica previa para determinar si es apropiado y seguro.

Duración del tratamiento

El balón gástrico no es permanente: habitualmente se mantiene en el estómago alrededor de seis meses, pasado ese tiempo se retira. Durante ese período se trabaja con el equipo de salud para consolidar cambios en la alimentación y el estilo de vida que permitan sostener la pérdida de peso tras la extracción.

Ventajas frente a procedimientos quirúrgicos

Comparado con las cirugías bariátricas convencionales, el balón ofrece varios beneficios: es reversible y no modifica la anatomía de forma definitiva, lo que disminuye los riesgos y las secuelas a largo plazo. Su colocación es mínimamente invasiva y se realiza de forma ambulatoria, con tiempos de recuperación más cortos que una intervención quirúrgica. Para muchos pacientes representa una opción intermedia entre tratamiento conservador y cirugía.

Resultados esperados

Los resultados dependen del paciente y del compromiso con los cambios de conducta. En promedio, pacientes pierden entre el 10 % y el 15 % de su peso corporal total durante los seis meses que el balón está instalado. Estos porcentajes pueden variar según la adherencia a las recomendaciones nutricionales, el nivel de actividad física y el apoyo psicológico. Es importante entender que el balón es una herramienta, no una solución instantánea ni milagrosa.

Posibles efectos secundarios y riesgos

Es común experimentar molestia al inicio: náuseas, vómitos leves y cólicos abdominales suelen presentarse durante los primeros días mientras el organismo se acostumbra al dispositivo. Estos síntomas tienden a mejorar con el tiempo y manejo farmacológico cuando es necesario. En casos poco habituales pueden ocurrir complicaciones más serias, como la deflación o migración del balón, lo que obligaría a su extracción inmediata. Por ello se realizan controles periódicos para detectar cualquier problema a tiempo.

Seguimiento médico y apoyo multidisciplinario

El éxito del tratamiento depende en gran medida del trabajo conjunto entre el paciente y un equipo multidisciplinario: médicos, nutriólogos, psicólogos y, en algunos casos, fisioterapeutas o entrenadores. El seguimiento incluye revisiones médicas, ajustes dietéticos y planes de ejercicio para asegurar que la pérdida de peso sea segura y sostenible, tanto durante la presencia del balón como después de su retiro.

Consideraciones finales y recomendaciones

El balón gástrico representa una alternativa valiosa para quienes buscan una opción menos invasiva que la cirugía bariátrica, ofreciendo un apoyo físico para iniciar cambios en la alimentación y el estilo de vida. No obstante, su eficacia depende del compromiso personal y del soporte profesional. Antes de decidirse, es esencial hablar en detalle con un especialista sobre los beneficios, limitaciones y posibles riesgos.

Aviso importante

Este texto tiene fines informativos y no reemplaza una evaluación médica personalizada. Consulte a un profesional de la salud cualificado para recibir orientación y tratamiento adaptado a su situación particular.