Tratamiento del angioedema: opciones y manejo clínico

El angioedema es una reacción que provoca hinchazón rápida de tejidos, a menudo en la cara, labios, párpados o mucosas respiratorias. Puede aparecer como un episodio aislado o como parte de cuadros recurrentes. Identificar la causa y el riesgo de compromiso de la vía aérea es clave para decidir el tratamiento adecuado y la vigilancia. Este texto explica las opciones terapéuticas, cuándo acudir al médico y recomendaciones prácticas para el paciente, con un enfoque en medidas seguras y basadas en la práctica clínica.

Tratamiento del angioedema: opciones y manejo clínico

Este artículo es solo para fines informativos y no debe considerarse asesoramiento médico. Consulte a un profesional de la salud calificado para obtener orientación y tratamiento personalizados.

¿Qué es el angioedema en la cara?

El angioedema en la cara se manifiesta como hinchazón súbita y localizada de piel y mucosas. Suele afectar la cara, los labios, los ojos y, en algunos casos, la lengua o la garganta. La hinchazón se produce por la acumulación de líquido en la dermis profunda y el tejido subcutáneo, mediada por histamina o por vías kinina-dependientes en formas hereditarias o inducidas por medicamentos. Los episodios pueden ser dolorosos o pruriginosos y, aunque la mayoría se resuelve en horas o días, la localización en la vía aérea requiere atención urgente.

¿Qué provoca la hinchazón y cómo se evalúa?

Las causas comunes incluyen reacciones alérgicas a alimentos, picaduras, medicamentos (como los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina) y exposición a alérgenos ambientales. También existen formas hereditarias debidas a deficiencias o disfunción del inhibidor de C1. La evaluación por el médico incluye historia clínica detallada, examen físico y valoración del riesgo de compromiso respiratorio. Pruebas complementarias pueden incluir análisis de laboratorio (por ejemplo, complemento C4, pruebas de alergia y, en contexto de anafilaxia, marcadores como triptasa) para orientar el diagnóstico y la prevención.

¿Qué medicación se utiliza en el tratamiento?

En el manejo agudo se emplean antihistamínicos H1 y H2 y corticosteroides para formas mediadas por histamina; en casos de anafilaxia es imprescindible administrar adrenalina intramuscular y soporte vital. Para angioedema por inhibidores de la ECA, se suspende el fármaco implicado. En angioedema hereditario existen tratamientos específicos como concentrados de inhibidor de C1, bradiquinina antagonistas o inhibidores de la calicreína, según disponibilidad local. La elección de medicación debe hacerla el médico según la etiología, gravedad y antecedentes del paciente, respetando indicaciones y contraindicaciones.

¿Cuándo debe ver al médico?

Debe solicitar atención médica urgente si la hinchazón progresa rápidamente, hay dificultad para respirar, cambios en la voz, sensación de obstrucción en la garganta o signos de anafilaxia (mareo, pérdida de conciencia, hipotensión). Para episodios recurrentes, el paciente debería consultar con un especialista en alergia o inmunología para identificar desencadenantes, realizar pruebas diagnósticas y evaluar estrategias de profilaxis. Además, cualquier inicio de angioedema tras iniciar una nueva medicación exige revisión médica para considerar la suspensión y alternativas.

Consejos para el paciente tras el tratamiento

Después de un episodio, es recomendable que el paciente mantenga un registro de episodios: tiempo de inicio, duración, alimentos o medicamentos recientes, y tratamiento recibido. Si existe riesgo de anafilaxia, portar un autoinyector de adrenalina puede ser indicado por el médico y se debe recibir formación sobre su uso. Evitar desencadenantes identificados, usar identificaciones médicas en caso de alergias graves y acudir a controles con servicios locales de alergología o inmunología facilitan la prevención y manejo. Informar a otros profesionales de la salud sobre el antecedente es fundamental.

Conclusión

El tratamiento del angioedema depende de la causa, la severidad y la localización de la hinchazón, con prioridad en la protección de la vía aérea. Las medidas van desde antihistamínicos y corticosteroides en cuadros alérgicos hasta terapias específicas en angioedema hereditario. La intervención temprana por un médico y la identificación de desencadenantes ayudan a reducir recurrencias. Pacientes con episodios graves o repetidos requieren evaluación especializada para planificar tratamientos preventivos y medidas de seguridad.